Cada atardecer
espero la noche
esa fugitiva
y errante luz
que perfila
mi piel y atrae
tu mirada hacia
mis atardeceres
más puros.
Cada noche
es el amor,
sumiso en la
intrusa oscuridad
de nuestros cuerpos,
atardeceres blancos
y bohemias noches
que lucen un trío
perfecto.
6 comentarios:
Lourdes, como siempre espléndida.
Un poema impregnado de sudor tendido al aire fresco, así lo siento.
"Cada noche
es el amor,
sumiso en la
intrusa oscuridad
de nuestros cuerpos"
La última imagen -el trío perfecto- es muy buena. Bravo Lou.
Gracias a los "anónimos" y por esa entrega en vuestros comentarios.
Besos
La noche, siempre tan mágica.
Salu2, Lourdes.
Pues sí Diego, la noche tiene su encanto, quizás en momentos tan especiales como en "Piel, casi tacto".
Besos.
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