Has vuelto, he olido
el olor de tu piel
y me arrodillo
ante ti, sumisa.
Busqué tu calor
entre sombras de árboles
que parecían grandes monstruos
te buscaba entre las montañas
y los bosques donde tantas
veces nos amamos,
me penetrabas como un animal
salvaje entra dentro de mis entrañas,
sabías que te necesitaba
que era tuya.
Has vuelto para abrigar mi frío
con el calor de tus palabras,
pero mi cuerpo Morfina,
sigue sediento, frío, desnudo
4 comentarios:
Muy bonito, Lourdes. Delicado y bello.
Salu2.
Lou, me encanta como escribes.
Bss.
Gracias Dyhego y Máximo por compartir este poema.
Salió del vacío, de la nada, del dolor, del amor, de la espera, del tiempo, de la desolación y la añoranza.
Muchas gracias a ambos.
Seguro que la espera mereció la pena.
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